En las últimas horas, el norte de la provincia de Buenos Aires se ha visto gravemente afectado por intensas lluvias que han provocado inundaciones sin precedentes. Localidades como Zárate, Campana, San Antonio de Areco y Salto han registrado precipitaciones acumuladas de entre 150 y 400 milímetros en menos de 24 horas, superando ampliamente los promedios históricos para esta época del año.

La situación ha obligado a evacuar a más de 2.000 personas, con barrios enteros bajo el agua y rutas nacionales, como la 8 y la 9, completamente anegadas . El intendente de Zárate, Marcelo Matzkin, informó que en algunas zonas de la ciudad el agua alcanzó hasta dos metros de altura, describiendo la situación como «muy grave» y solicitando a los vecinos que no salgan de sus casas salvo por extrema necesidad.

Mientras se da una de las peores inundaciones en años, con familias evacuadas, calles anegadas y municipios completamente colapsados, Milei no sólo no emitió mensajes de apoyo ni anunció medidas concretas para asistir a las familias afectadas, sino que en plena emergencia, decidió volcar su energía no en la gestión de la emergencia sino en sus redes sociales. La prioridad, al parecer, sigue siendo la “batalla cultural” antes que el auxilio a los damnificados.

Durante el día de hoy, se ha observado que el mandatario ha realizado múltiples publicaciones y retuits, centrados en temas ajenos a la crisis que afecta a miles de ciudadanos en el norte bonaerense. Desde esta mañana, mientras se registraban los peores momentos de la inundación, Milei le dio retuit a más de 60 posteos en X, la mayoría vinculados a peleas políticas, ataques a periodistas o elogios a su gestión. Además, en las últimas 24 horas, compartió 23 historias en Instagram.

El contraste entre la realidad de miles de argentinos bajo el agua y la obsesión del presidente por su presencia digital vuelve a generar críticas desde distintos sectores, que cuestionan la desconexión del Gobierno con las urgencias del país. Mientras las autoridades provinciales y municipales coordinan esfuerzos para asistir a los damnificados, la actividad del presidente en redes sociales contrasta con la gravedad de la situación que vive una parte significativa del país.

La combinación de una emergencia climática sin precedentes y la aparente desconexión del presidente con la realidad que enfrentan miles de argentinos plantea interrogantes sobre las prioridades y el compromiso del gobierno nacional en momentos de crisis.

“Estamos haciendo lo que podemos con los recursos municipales, pero en una emergencia de esta magnitud necesitamos la presencia del Gobierno nacional”, expresó un funcionario de Defensa Civil de San Antonio de Areco, que pidió no ser identificado. “Ni un llamado, ni un camión, ni una palabra. Es como si no existiéramos”, agregó con visible frustración ante la falta de coordinación con Nación.

Desde sectores de la oposición no tardaron en aparecer los cuestionamientos. “Mientras los vecinos de Zárate y Campana están con el agua hasta el pecho, el presidente está haciendo memes”, ironizó un dirigente bonaerense del peronismo en diálogo informal. El silencio oficial frente a la catástrofe también fue criticado por intendentes afectados, que señalaron la falta de coordinación con Nación para articular ayuda inmediata.

En paralelo, organizaciones sociales comenzaron a movilizar recursos por su cuenta para asistir a las familias evacuadas, ante lo que consideran una “ausencia total del Estado nacional”. En voz baja, algunos funcionarios reconocen que la lógica de “no intervención” del gobierno libertario complica aún más la capacidad de respuesta ante este tipo de eventos extremos, cada vez más frecuentes por el cambio climático.

Se esperan nuevas tormentas para las próximas horas en Zárate y la preocupación de los vecinos se acrecienta.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *